Mi antigua inocencia, ¿dónde está? Busco en el laberinto de mi memoria y sé que fue, que existió hasta hacerme sonreír como un muchacho feliz, pero que ya no está, que no podré recuperarla si no es por vejez y olvido, por enfermedad mental o discapacidad psíquica. Quizás lo único bueno de la vejez sea eso, encontrarme de nuevo con mi antigua inocencia, y no saber ya más de las cosas oscuras de los hombres mal hechos, de los mal definidos, de los mal trazados. Mirar a un rostro y no ver más que luz y compañía, no ver más que lo que debió ser y no está siendo.
Virgen y felizmente desconcertado, sin razón intelectual, sin pena, sin melancolía, sin miedo, como injertado en mí y de mí, exótico, locuaz, sin sombra, encantador..., así me quiero.
No ese árbol viejo en el que nunca cantaron los pájaros.
Mi antigua inocencia, ¿dónde está?
Virgen y felizmente desconcertado, sin razón intelectual, sin pena, sin melancolía, sin miedo, como injertado en mí y de mí, exótico, locuaz, sin sombra, encantador..., así me quiero.
No ese árbol viejo en el que nunca cantaron los pájaros.
Mi antigua inocencia, ¿dónde está?
En saber apreciar lo bueno que hay en ti y que tienes a tu lado....poda las ramas viejas.
ResponderEliminar