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Mostrando entradas de diciembre 8, 2013

Vuelan los grajos y una antigua edición de Verne...

Vuelan los grajos y son como una sortija negra en el aire para concelebrar el fin de los colores... ahora todo es frío y a ratitos también distancia... y quedan pendientes el lirio con ojeras, la mujer con manoplas de dibujos de nieve, la costura en la media a la par que amanece, algún abrazo póstumo y otro un tanto pirata, la Volpina en la nieve, aquella Derbi vieja y campeona del mundo, cuatro miradas cándidas y un entredós de ojos jugando al escondite... vuelan los grajos y se posan sobre el hielo sucio como un broche negro o una escarpia para concelebrar lo gris y lo anodino, el silencio traidor, el sentimiento anónimo, la turbación pequeña mientras las reses tiritan en los campos de escarcha y la luz es tan clara que se clava en los ojos... y miro los augurios que ha puesto el meteorólogo en la red para este ciclo nuevo... todo va a bajo cero y no se ven ya hormigas ni abejas, quizás porque no merece la pena. De estos días he aprendido algo... a verme más mayor en las mol

56COMO30 (un blues de hoy).

Hoy soy un tipo peor, más malo, más amargado, más receloso, más cabrón, más acabado... gracias por ello al banco que me agobia cada final de mes, a la Seguridad Social que me clava como si fuera un ladrón, a la Hacienda Pública que me trata como al peor de los delincuentes, al gobierno que me tramita como un autentico defraudador y que en vez de defender derechos que se han ganado montones de generaciones anteriores a la mía, me los roba cada segundo... gracias a los tipos que me hacen cada uno de mis días desagradables, a los que me roban tiempo de vida para que tenga que dedicar todo mi oxígeno a intentar salvar los muebles... gracias a todos los hijos de la gran puta que intentan cada día que sea un amargado sin salida, gracias a los que desean con todas sus fuerzas que me llegue la ruina y que desaparezca entre la mierda que ellos montan entre graznidos... gracias a los que casi han conseguido que no me llegue la poesía, que no pueda casi ni esbozar un dibujo ni una jodida