Herme G. Donis leyendo STANDDART durante nuestro encuentro en Béjar Llegaron Herme y Begoña justo para sacarme de una pequeña crisis de estrés personal y de este agobio crónico que me viene con las fiestas, un agobio de ganas de hacer y no saber qué... y charlamos tendidito de demasiadas cosas mientras yo valoraba el rostro de mi Herme linda y los cambios producidos desde hace ya casi dos años que nos vimos por última vez... y de pronto la vi como una Juana de Arco de ahora, vital, entregada a dos o tres ideas sólidas, queriéndose y queriendo con fuerza, peleando por hacerse en lo que, desde mi punto de vista, ya es, una mujer sentada en el valor y en la capacidad crítica. Que me encantó tener a las dos frente a mí en la terraza de PdT, desayunando cafetitos con ‘bolos de arroz’ portugueses y hablando de Claudio, de Pepe Hierro, de Paulina Cervero y de Víctor, de mi Morantón... y también de cómo ser y actuar en el tiempo que resta, de en qué intentar crecer... un beso gordo para ...
Bitácora de Luis Felipe Comendador